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Cartomante, agárrate que te caes: empezamos la temporada de eclipses con este eclipse de sol en Tauro, y (por si no lo has notado estas dos últimas semanas) se viene tremenda. ¿Empezamos?

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Pasado

Me encantaría poder decirte que me está cundiendo mogollón y que soy una maestra en conciliar las quince facetas que tengo activas en este momento. Lo cierto es que lo único que llevo al día es la serie de Moon Knight y, más que ayudarme a relajarme, lo único que estoy consiguiendo es una obsesión nueva (y unas ganas horribles de abrazar a un personaje de ficción y decirle que todo va a estar bien. Otra vez).

¡Truco de tarotista! ¿Quieres practicar pero ya no sabes qué preguntar y te da vergüenza leer para otra gente? ¡Lee para personajes ficticios! Imagina que están delante de ti y te están preguntando qué necesitan saber para el problema que tienen entre manos. En el caso de los protagonistas de Moon Knight, yo probablemente usaría el tarot egipcio, una piedra de luna, y muchos clínex para llorarlo todo.

¡Ah! Estoy en plena producción del segundo envío de los 78 Maníacos, así que si quieres apuntarte, ¡ahora es el momento! Las inscripciones para el segundo envío se cierran el día 31 de mayo, no lo dejes para el final.

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Presente

Te cuento un poco por encima lo que está pasando en el cosmos, a ver si encuentras un reflejo de lo que está pasando aquí abajo.

Hay un cerro de planetas en Piscis ahora mismo. Venus, Marte, Júpiter y Neptuno están ahí de fiesta, y esto hace que la vida no parezca del todo real. Al ser el último signo de la rueda zodiacal, Piscis tiene un aire bastante liminal, como una puerta a otra dimensión. A esto le sumamos que estamos en la temporada Tauro, y tenemos un cóctel interesante de que la realidad, simplemente, nos agota y necesitamos parar, comer y dormir de forma urgente.

Hemos tenido un tiempo de tranquilidad (o, al menos, de no poder echarle culpas a la astrología de nuestras movidas) con todos los planetas directos, y esto se acaba el 10 de mayo. Efectivamente, Reader, nuestro aspecto favorito vuelve a estar presente: Mercurio vuelve a retrogradar, esta vez en Géminis. El lenguaje crea la realidad, cartomante. Mucho cuidado con lo que dices (y lo que no) este mes.

Y, por último, empezamos temporada de eclipses en el eje Tauro-Escorpio. Los eclipses traen picos de energía muy potente y muy caótica relacionada con el signo en el que se den, así que en general se recomienda que respires profundamente y dejes que el universo haga la suya. El eje Tauro-Escorpio significa que los eclipses de luna nueva (como el de hoy) se dan en Tauro y los de luna llena en Escorpio (que son signos opuestos en la rueda del zodiaco). A pesar de ser opuestos, o quizá precisamente por eso, estos signos tienen más en común de lo que puede parecer a simple vista, y tiene pinta de que en estos próximos 18 meses vienen enfrentamientos con lo que entendemos por “lujo” y “abundancia”, el control que tenemos (o no) sobre nuestra vida y lo que acumulamos, y cómo nos relacionamos con nuestros propios ciclos.

Semillas que plantar en este ciclo:

- A Tauro le estresan las prisas. Hay miles de cosas que hacer y no hay manera de que te centres (gracias, planetas en Piscis), así que hazlas despacio y de forma agradable. ¿Cómo puedes hacer tus tareas un poquito más apetecibles? ¿Teletrabajando con un bol de fresas para picar? Échales un chorrito de leche condensada. No se lo diré a nadie.

- Mercurio Retro en Géminis, además de pedirnos control sobre lo que decimos, nos trae revisiones de viejas amistades o de libros favoritos que podríamos releer. ¿Quién te viene a la mente con la frase “quiero retomar el contacto con esta persona”? ¿Qué texto te gustaría revisitar después de mucho tiempo?

- El eclipse en Tauro nos trae preguntas sobre lo que tenemos, y lo que consideramos importante y digno de poseerse. Si cada cosa que tienes estuviera unida a ti por un hilito de energía, y fuera tomando muy poquito de energía cada día que pasa que está contigo… ¿cuántos hilos cortarías? ¿Cuáles merece la pena conservar?

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Futuro

Usamos hoy una baraja que me llegó estas navidades, el Luna Sol Tarot, de los fundadores de Liminal11, la editorial de varias de mis barajas favoritas. Los colores me dan un rollo estupendo, y creo que en general nos hace falta un poco de sol y de luna en estos días tan nublados. Veamos qué tiene que contarnos hoy.

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Las cartas tendrán colores pastel, pero los mensajes son los que son. El Carro y la Torre nos traen dos polos opuestos de una escala, en la que el Carro representa que todo lo tenemos bajo control, y la Torre nos recuerda que realmente nada lo está. Estas dos energías tan potentes son las que están en juego en este eclipse, con Tauro tirando por la parte del control y de la conservación, y Escorpio enfrente buscando, con ese rayo celestial, destruir todo lo que no es esencial.

Para navegar esto tenemos a la Sota de Espadas: una principiante que está aprendiendo a manejar su arma y que utiliza el intelecto para descubrir el mundo. No es muy alentador, pero realmente es justo lo que necesitamos: una visión nueva, un cambio refrescante de perspectiva para entender lo que es realmente importante.

La Carta en Sombra de esta tirada (la carta que está al final del mazo, lo que no se ve bajo las capas de realidad, o, en este caso, lo que no queremos ver), es el 5 de copas. Lo que está en el ambiente es el duelo por lo que se pierde, que no nos deja darnos cuenta de lo que aún conservamos. Saber decir adiós lleva consigo saber dejar ir. Suéltalo.

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Te abrazo, Reader. Nos vemos al otro lado.

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